domingo, 16 de agosto de 2009

08. Cuba ! Eliseo Altunaga

Ya tenía 100 mil dólares para hacer mi película. Ya se podía decir que todo era una realidad, pero yo aún no confiaba en mi guión 100%. Llamando a otros directores (Andres Wood y Pablo Larraín), me recomendaron que lo mejor que podía hacer era irme a Cuba a trabajar con el consultor de guiones Eliseo Altunaga, el mismo que había trabajado en Machuca y Tony Manero. Larraín me dio su email. Le escribí, le mandé creo que 10 emails, pero no tenía respuesta. Hasta que un día me pide un tratamiento en 3 líneas. Se lo mandé... a las 3 semanas me comentó que al guión le faltaba mucho, que no era malo, pero que él dudaba que me podía ayudar por su apretada agenda. En resumen, educadamente se me arrancó. Eso sólo significó para mí que tenía que trabajar con él. Por alguna razón supe que él iría a España a dar un curso y me conseguí el teléfono de su hotel. Lo llamé miles de veces y el conserje siempre me decía lo mismo: él te llamara. Creo que por pena o insistencia, un día el conserje, que ya eramos amigos, me comentó que Eliseo estaba en el bar del hotel y que podía llevarle el teléfono. El tipo yo creo que se compadeció de mí.... En un minuto logré convencer a Eliseo Altunaga que quería trabajar con él y que ya tenía pasaje para irme a Cuba. Creo que lo agarré volando bajo y me dijo que sí, que si estaba el 1º de octubre ahí me podía recibir 2 semanas.
Inmediatamente organicé todo.
El 1º de octubre pisé La Habana, había arrendado un segundo piso de una casa que quedaba a una cuadra de Eliseo. La casa pertenecía a una ex colaboradora de Fidel, la cual vivía en el primer piso. Desde ese día mi proyecto cambió.
Eliseo era un hombre alto, con pelo y barba blanca, de una piel negra&cafe. Se movía lento y me miraba con cierta incredulidad. Las próximas dos semanas serían trabajar de 7am a 10pm sin parar. No me voy a detener en mi experiencia personal por Cuba, ya que eso es otra película, pero lo que me dió esa isla es lo más maravilloso que me ha regalado la vida.
Cuando ya faltaban 5 días para que se acabara la segunda semana yo ya tenía claro que me faltaría tiempo, en la primera etapa sólo escribimos el argumento y faltaban todos los diálogos. Una mañana, Eliseo me comentó que si quería me podía quedar una semana más. Yo estaba muy contento. Inmediatamente llamé a Magdalena a Santiago y le pedé que se tomara un avión a Cuba, que necesitaba su ayuda, que la cantidad de información que me entregaba Altunaga era demasiado y necesitaba a alguien a mi lado para procesar. En especial ahora que venían los diálogos. Magdalena se tomó un avión y llegó a La Habana a los tres días. Eliseo en un principio miró con desconfianza la inclusión de esta nueva persona, pero se daba cuebta que yo sólo ya me estaba fundiendo. El trabajo de Magdalena era ayudarme a asimilar los conceptos que Eliseo me daba.. con ella conversé por horas cuando él se iba. Al periodo de dos días, ya era parte de nuestro diálogo con Eliseo, aportó toda esa visión femenina que con Eliseo habíamos dejado un poco de lado. Fue un gran aporte, al punto que Eliseo me comentó que si trabajaba con más directores chilenos ella podía ser su asistente. Yo haciendome el gil le dije que sí, pero nunca se lo permitiría.... jajaja.
Terminanmos el ultimo día de las tres semanas... había sido muy duro, pero teníamos un guión. Ya me sentía seguro para hacer la película.
Eliseo fue un ángel. Un mes después murió su amada mujer... Él había sacrificado parte importante de su tiempo para trabajar conmigo... Yo seré un eterno agradecido de este gesto y en un 50% esta película está dedicada a ella.
Al regreso de este viaje tenía un guión, una amistad con el mejor asesor de guiones de latinoamérica y una socia que sabía que lucharía conmigo hasta el final. Puedo decir que más que eso, no se necesita nada para hacer una película.

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